Al salir marcha atrás de una plaza de estacionamiento, la alerta de tráfico posterior detecta cualquier vehículo que se aproxime, por ambos lados. La señal acústica advierte de una colisión inminente. El «lado crítico» aparece primero en amarillo y después en rojo en la pantalla de infoentretenimiento. Los frenos se activan automáticamente en caso necesario.